Llega el tercer verano que pasamos en esta casa y aún seguimos sin aire acondicionado. Nada grave… más o menos, simplemente recuerdo el primer verano que pasamos y la promesa que hicimos cuando acabó: Ni un solo veranos más sin aire acondicionado. Eso dijimos. Como siempre la economía manda y volvemos a repetir (conciencia: claro, la Xbox es más importante que el aire acondicionado, y el Mac, y cosas para la moto…) Pues sí, y tu calla.
Está haciendo un calor insoportable, al margen de lo que se vive dentro de casa. No hay manera de salir a trabajar a gusto, a menos que te vayas en camisa con la moto y luego lo pases mal por la noche si sales tarde. Sumando a todo esto la alergia, empiezo a echar mucho de menos el invierno. Piscinas las hay cubiertas y si hace frio te puedes abrigar. Diría que Kuro piensa lo mismo, no es que le vea incómodo, pero en invierno no duerme así.
Que conste que el nene no se estaba estirando ni nada parecido, estaba durmiendo así. Tienen que estar cansados. Los dos. Se pasaron el principio de la noche peleándose, Kuro enfadado con Keiko, pero con razón. La enana igual se la tiene guardada todavía de cuando llegó a casa y Kuro no la dejaba ni respirar, pero ahora que la cosa está bien podría relajarse un poco. Ayer Kuro se acercó a ella y se puso a lamerle las patitas, a limpiarla como buen hermanito y darle mimos, la otra puso cara de ¿lol? y al rato se puso borde. Kuro lo llevaba escrito en la cara: "Encima que me esfuerzo, dejo a un lado mi orgullo y vengo a darte mimos, ¿te portas así? Pues ahora te jodes, ¡y fuera de mi silla!"
...Les tuve que separar tres veces...
En cualquier caso la cosa avanza a mejor, ya juegan mucho, ahora falta que se peleen un poco menos, no ver de vez en cuanto una bola tricolor de la que salen maullidos guturales.
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