Cuando el despertador suena por las mañanas me estiro (tres veces), y maullo continuamente refrotando mi cara contra la de papá, que casi siempre es el primero que se levanta.
Cuando por fin empieza a abrir los ojos, le doy unos lametones en la nariz pidiéndole que me acaricie y me devuelva los buenos días. El me da besitos, pero nunca lametones. Ademas, su lengua es muy grande y da miedo.
La segunda parte, levantarse de la cama, es la que más le cuesta. Si solo durmiese por la noche lo entendería, pero el siempre se va de casa por las mañanas y por las tardes a dormir a otra parte (nadie podría vivir durmiendo solo 6 ó 7 horas). Es yun vago.
Luego, como todas las mañanas, Damián se va al baño y hasta que el no entra yo no me pongo a comer y beber, siempre le espero. A veces se retrasa y tengo que maullarle para que vaya al baño, que tengo hambre y sed cuando me levanto.
Mientras papá desayuna yo intento jugar con él, pero no suele tener ganas, algo sobre "shhh, mama duerme". No se qué quiere decir...
Cuando ha terminado de desayunar, papa se va a dormir a otro sitio. No se por qué no se puede quedar a dormir con nosotros, y nunca me lleva con él... pero por lo menos nos da un buen achuchón a mamá y a mí. A mamá también le da lametazos, pero son raros.
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